Resumen:
En este sentido, la arquitectura orientada a servicios SOA (Service Oriented Architecture)
establece un modelo arquitectural cuyo objetivo es mejorar la agilidad, eficiencia y
productividad de una empresa [2], mediante la integración de sus aplicaciones
independientes y permitiendo el acceso a sus funcionalidades (las cuales se prestan como
servicios) a través de la red; esto significa que SOA pone a disposición recursos o servicios
que pueden ser descubiertos y consumidos por entidades que no necesitan conocer con
anterioridad la existencia de los mismos [3]. Los servicios son funcionalidades concretas
que pueden ser descubiertas en internet, y que ejecutan tareas que van desde la
realización de una operación matemática simple, hasta otras más complejas, como por
ejemplo, la consulta o modificación de información de clientes en una base de datos.
Aunque no necesariamente se deben implantar servicios Web en el camino hacia la
adopción de una solución de diseño basada en SOA, sin duda alguna, ésta es la
implementación más habitual y madura de éste modelo arquitectónico [1, 4, 5].