Resumen:
Una de las formas más complejas en las que el hombre se ha relacionado es través de las religiones, estas, han soportado diferentes creencias que han significado y elaborado una serie de prácticas en torno a la tradición, a los hábitos y a la costumbre. Esencialmente, la fe que profesan las religiones, descubren una oportunidad única de la vida humana, que concretamente desde la iglesia cristiana (católica), establece que el hombre nace totalmente, en la muerte. Este principio, dio peso a la construcción y representación de ciudades, producto de la conquista por parte de España a lo que sería con los años Colombia y todo el territorio americano. Este proceso, generó todo un entramado de significados, símbolos, fiestas, iglesias y demás, que se convirtieron en el fundamento de una sociedad que fue marcada por la tradición religiosa y que sustentó e incluso justificó, la expresión del poder tanto político, como social y económico con la iglesia como mediadora.
Siendo evidente la capacidad de la iglesia para involucrarse en áreas de la vida cotidiana y la mentalidad, hace del estudio de las prácticas sociales en torno a las creencias religiosas una vía para percibir cómo se introduce en la intimidad de la mente de las personas. Para muchos cristianos el mantener el alma libre de culpa y de pecado es fundamental para su vida, en este contexto, el papel de la iglesia en el conjunto de creencias, era fundamental, ya que justamente, en el momento en el que se legitima el proceso conocido como Colonia, es donde estos preceptos se hacen más evidentes y juegan un papel determinante en las dinámicas sociales de la ciudad de Popayán. Este estudio se sitúa en las dos últimas décadas del siglo XVIII (1780 – 1800), por estar ya en etapa de madurez este proceso, y puede ser explorada la ciudad desde los ámbitos que conciernen, manteniendo las proporciones, a una concepción urbanizada del espacio.
