Resumen:
Hay que advertir que cuando se hacen investigaciones sobre el conflicto armado, se termina satanizando y estigmatizando la guerra y los actores armados que han tomado partido en ella, no obstante y desde el punto de vista hay que considerar que las guerras son tan viejas como la misma condición humana, la mejor prueba está representada en el libro ―El Arte de la Guerra‖ de Sun Tzu, en la que se señala que ―jamás se ha visto que una guerra prolongada diera provecho a ningún país, esto en términos macro, pero para casos específicos como en el Valle del Cauca, parece que las lógicas cambian, debido a que una guerra prolongada favoreció en su momento a ciertos círculos económicos y políticos; de ahí porque es importante analizar cuáles fueron las condiciones económicas, políticas y militares que dieron origen al Bloque Calima de las AUC (Autodefensas Unidas de Colombia) en el Valle del Cauca entre 1999 y 2004, y de paso tratar de despejar a lo largo del texto, que tan cierto es la hipótesis de que el paramilitarismo en Colombia fue una política de Estado; y como un Estado Nación que no ha podido materializar el monopolio de la armas, de él espacio suficiente para que actores armados, ya sean guerrillas y grupos paramilitares hagan sus santuarios de inmunidad donde puedan tener cierto grado de hegemonía.