Resumen:
Teniendo en cuenta la necesidad de desarrollar sistemas de tratamiento que sean eficientes en aguas residuales de tipo doméstico, a las cuales en la mayoría de casos no se realiza ningún tipo de tratamiento siendo la principal causa de contaminación de las masas de agua, tanto superficiales como subterráneas (Bocardo, 2010), es necesario procesos eficientes para reducir los índices de contaminación del agua, los cuales se cuantifican principalmente en las variables DBO, DQO y SST.
Por ello surge la propuesta de aplicar sistemas de tratamiento que sean eficientes en la remoción o transformación de contaminantes y que además sean viables en términos económicos, técnicos y sociales. Un ejemplo son las tecnologías no convencionales como los humedales construidos de flujo subsuperficial (HSS, por sus siglas en inglés) los cuales se buscan implementar con el fin de satisfacer las necesidades básicas de agua potable y saneamiento para las zonas rurales (RAS Título J, 2010).
Con la información anterior, la necesidad de utilizar sistemas para el tratamiento de aguas residuales en zonas rurales y la importancia de generar un impacto en la comunidad donde se enmarque el mejoramiento de la calidad de agua del acueducto Aires del Campo, se realizó un estudio el cual se llevó a cabo en el Hostal El Molino, ubicado en la zona rural de Paispamba, Municipio de Sotará, donde se encuentra un sistema de tratamiento de aguas residuales domésticas con humedal construido plantado con cartucho blanco (Zantedeschia aethiopica). En este sistema se realizó un diagnóstico del funcionamiento y se evaluó la remoción de carga orgánica cuantificada en DBO, DQO y SST, con el fin de evaluar la eficiencia del sistema a la salida del recurso, teniendo en cuenta el tiempo de retención hidráulico y las cargas de entrada. En cuanto al diagnóstico realizado al sistema de tratamiento, este cumplió con los requerimientos para su adecuado funcionamiento, sin embargo se indican aspectos a considerar para lograr un mejor desempeño del sistema y replicarlo en las demás cuencas de los 11 acueductos rurales de la zona, implementando el tratamiento secundario, y mostrando que si es posible mejorar la calidad del agua.