Resumen:
La porcicultura en Colombia es una actividad importante, teniendo en cuenta que en los últimos 20 años ha logrado sostener un crecimiento económico altamente significativo. La práctica empresarial tenía el objetivo de complementar los conocimientos académicos y adquirir habilidades de manejo en los diferentes procesos productivos de los cerdos y en la comercialización y administración de empresas porcícolas.
La práctica empresarial se desarrollo en la granja la Rochela de la empresa Solla S.A, (Santa Rosas de Osos, Antioquia), clasificada como una granja multiplicadora. La granja cuenta con un total de 1080 cerdas activas, provenientes de la granja Betania en el departamento de Antioquia de la empresa Solla S.A., la empresa elabora un cronograma de actividades para las 52 semanas del año de acuerdo con las necesidades del mercado nacional, la parte reproductiva se realiza con inseminación artificial post cervical, buscando 52 grupos de partos (1 por semana) , cada grupo compuesto por 55 hembras , con un porcentaje de parición del 90%, cada hembra tiene 2.5 partos por año, para un total de 20 grupos de cerdas gestantes servidas con la genética Choice Genetics manejando las líneas L2 y L5. Las cerdas permanecen en constante evaluación de parámetros zootécnicos para su descarte.
La meta en la granja la Rochela consiste en que cada hembra en la etapa de lactancia debe destetar 11.5 lechones por camada a los 21 días de vida, donde cada lechón supere los 6 kg de peso para pasar a la etapa de preceba durante 7 semanas hasta llegar a los 32 kg ; posteriormente pasa a la etapa de levante durante 6 semanas hasta alcanzar un peso de 65 kg, luego se lleva a la etapa de ceba durante 12 semanas hasta alcanzar un peso final superior a los 85 kg para finalmente sacarlo al mercado en pie a los diferentes municipios del departamento de Antioquia principalmente , con un rendimiento en canal superior al 75%.
El sector porcicultor nacional atraviesa por uno de sus mejores momentos, este negocio mueve producciones representativas en los mercados nacionales, registrando crecimientos importantes dado el mayor consumo de esta proteína: 9,3 kg por persona en el 2018. Por lo que se concluye que se trata de uno de los productos estrella en la cocina colombiana llegando a generar un alto porcentaje de empleos de profesionales en el sector Agropecuario.