Resumen:
Como sujetos encuadrados en la cuidad, estamos abocados a un manejo del espacio y del tiempo relativo con los demás. Las normas de convivencia son pautas de carácter moral positivas, con las cuales los sujetos establecen sus relaciones con los otros. El sentido de la obediencia y la coordinada disposición al cumplimiento de órdenes establecidos socialmente, son la plataforma a la que por tradición, las personas se encuentran ligadas al denominado tejido social. De esta manera, la dicotomía de ser-social o anti-social cobra su significado en la relación reciproca con la sociedad. Las acciones y movimientos del cuerpo se van hilando a partir de concepciones culturales estereotipadas bajo una especie de voluntad dada dentro de la misma sociedad; de esta manera, el individuo que quiero plantear en este proyecto de trabajo de grado, se sujeta a la idea de sujeto anti-social, en el sentido de ir en contrasentido de los establecimientos de poder y autoridad que bajo diferentes lemas, terminan por afectar el comportamiento y actitudes del cuerpo de manera consciente e inconsciente.