Resumen:
Las características de presencia, permanencia y contingencia de los servicios de enfermería sitúan a las enfermeras en una condición crítica, tanto por el riesgo del evento adverso como por su capacidad y potencialidad para proveer la seguridad de los pacientes, promover medidas de protección para su equipo e institución, y para establecer un proceso de vigilancia continua de la calidad de la prestación de los servicios. En este sentido, la capacidad y voluntad de cuidado profesional y humanizado y su estrecha relación con la seguridad forman parte esencial de las competencias de enfermería; por tal razón, la reducción de situaciones resultantes de la atención insegura para los pacientes tiene en la enfermería un principal recurso estratégico. Dentro de las situaciones más preocupantes en relación con la seguridad del paciente, se encuentra las Infecciones Asociadas a la Atención en Salud- IAAS, que afectan a 7 y 10 de cada 100 pacientes hospitalizados en países de ingresos altos y países de ingresos bajos y medios, respectivamente. Asimismo, afecta directamente la calidad en la prestación de los servicios, generando una gran carga económica en las instituciones prestadoras de servicios de salud, debido al aumento de la estancia hospitalaria, re-intervenciones, mortalidad evitable, entre otros. Aclarando en que muchas de las medidas de prevención y control de estas infecciones son sencillas y costo-efectivas, pero requieren un cambio en la cultura sobre la seguridad de los pacientes en el personal sanitario.