Resumen:
La industria procesadora de carne incluye mataderos (de vacunos, cerdos, etc.) y la manufactura de una gran variedad de productos de carne. Los primeros especialmente generan cantidades significativas tanto de desechos líquidos como de residuos sólidos, emitiendo olores muy desagradables. Todos los efluentes, contienen sangre, estiércol, pelos, grasas, huesos, proteínas y otros contaminantes solubles. El municipio de El Tambo ubicado al sur occidente del departamento del Cauca, no es ajeno a esta problemática: el matadero de la cabecera municipal que semanalmente sacrifica un promedio de 50 reses y 15 porcinos, actualmente no cuenta con el sistema de tratamiento acorde a lo exigido por la ley, destinando las aguas de desecho directamente al sistema de alcantarillado que las conduce a la planta de tratamiento de aguas residuales, al igual que los residuos pequeños y medianos, que son arrastrados a la tubería mediante lavado con agua a presión, así como la sangre, el rumen y el estiércol. No contar con un manejo especial de desechos líquidos y sólidos, ha implicado una serie de multas y sanciones que conllevan una gran inversión de recursos para el municipio; los cuales se podrían destinar a la formulación de estudios de tratabilidad y posteriores diseños de tratamiento. Este tipo de investigación sobre los componentes de los efluentes del matadero y la concentración de estos, permiten determinar el impacto que pueden causar sobre el medio y los sistemas de alcantarillado, pues a pesar de que la industria matarife se constituye como una gran fuente de contaminación, no cuenta con amplios estudios que describan la dinámica ambiental de sus efluentes y las respectivas consecuencias que estos traen consigo.
En este trabajo, además de realizar la cuantificación y caracterización físico química de efluentes, se proponen algunas alternativas de tratamiento biológico para los vertimientos y sistemas de producción más limpia que permitan mitigar efectos negativos y por consiguiente evitar problemas de orden legal al municipio, además del mejoramiento en la calidad de vida de sus habitantes , especialmente de sectores aledaños al matadero, contribuyendo a que las estructuras de alcantarillado presenten buenas condiciones de funcionamiento, evitando incomodidades y malos olores gracias a una adecuada recolección y tratamiento de aguas residuales y a un adecuado aprovechamiento y disposición de los subproductos del proceso de sacrificio.