Experiencias políticas, comunitarias y emocionales de las mujeres organizadas del colectivo Periferia Crítica en Popayán

Abstract

Esta investigación está estructurada en tres capítulos. En el primero, “Vamos a la Lomita”: Memorias de poblamiento y las luchas barriales y organizativas femeninas, argumento que las mujeres del barrio de la Loma de la Virgen se han organizado política y comunitariamente en distintas formas y periodos diferentes de la historia del barrio, lo que permite que haya todo un contexto de organización social en el barrio y en el sector. El objetivo del capítulo consiste en reconstruir las memorias de estas mujeres con el fin de visibilizar su papel político y comunitario, así como analizar las diferentes formas de organización femenina que se llevaron a cabo en el barrio. El segundo capítulo denominado Demandas, intereses y afectos organizativos: Las mujeres participan y se organizan, desarrolla la idea según la cual, las mujeres jóvenes participantes de Periferia Crítica, se integraron al movimiento por distintas razones y en diferentes momentos, así crearon distintos vínculos y redes entre ellas y con lx niñxs y adolescentes del barrio. El propósito central de este capítulo es analizar cómo se crearon redes comunitarias, afectivas, emocionales en el proceso de Acción Colectiva en el barrio de la Loma de la Virgen. Finalmente, en el capítulo tres llamado “Nosotros acá resistimos”: La violencia cotidiana, argumento que las experiencias organizativas y de vida de las mujeres de la Loma de la Virgen y del movimiento local de base Periferia Crítica están atravesadas por la violencia estructural, que ha sufrido el barrio por la segregación social y espacial desde su nacimiento, y las formas en cómo esa violencia estructural se configura y se expresa en las prácticas de exterminio de las mal llamadas “limpiezas sociales” y amenazas que ocurrieron a finales de la década los ochenta e inicios de los noventa. Esta práctica afectó de manera diferencial a las mujeres del barrio que tenían un liderazgo y a sus familias. Esta violencia estructural se sigue expresando por medio de la violencia cotidiana en ciclos de violencia en el barrio.